Karla E. Medellin
Me tiento el pecho con las dos manos. Mi corazón late con fuerza. Irrigando la sangre, irrigando el veneno por las venas.
Su voz aterriza, suave, en mi frente torturada. Mientras yo pienso: <calla, "corazón delator"> y me golpeó 1 o 2 veces con el puño, para tratar de ahogar el repicar de su negra campaña.
Por un momento, la imagino cómo mi verdugo, como mi dueña, como mi ama. La dueña de esta bestia que no se silencia; dueña de mis pesadillas y de mis ilusiones. Gruñó asustado. Imaginando sus afiladas intensiones, esas que puede guardar en su espalda.
Y sigo consumiéndome en la letanía de mis palabras: " pero la amas, la amas, le amas..."
Y arden las letras acompañadas de sangre. Amarrándose fuerte a mis piernas. Voces de locura, de una muerte que aún no llega. Y yo solo expiro, expiro. Soltando el baho de las entrañas. Viendo como se acerca. Extiende sus brazos y me retraigo en dos patas. " Calla corazón, que no entiendes, gozas de la nada".
Me agito y gruñó de nuevo, con el gruñido cortado. Uno que trata de aullentarle, otro que le añora.
Y ella tan sólo logra asirse de mi rostro. Y la sangre irrigando mi cuerpo. Saltando a sus manos, intoxicándole conmigo.
Pone su mano cerca de mi boca. Busco morderle, pero me toca los ojos. Me ciega. Casi muero. Me doblego.
Vuelvo a respirar como siempre. Besando su mano que calla mi pecho.
Es una ventana por la cual descubrimos la posibilidad de nuevos mundos narrativos. Son escrituras que experimentan con emociones figuradas desde el relato.
Taller de expresión escrita. Facilitadora: Margarita Díaz de León Ibarra
31 mar 2016
14 mar 2016
Abandono
Karla E. Medellin A.
La incertidumbre repica en los labios
Campana de 8:30.
Las preguntas sin respuesta,
Se multiplican.
Te ahogas en el abandono
Sobrepasa tu sien.
La incertidumbre repica en los labios
Campana de 8:30.
Las preguntas sin respuesta,
Se multiplican.
Te ahogas en el abandono
Sobrepasa tu sien.
9 mar 2016
Sin mi
Emmanuel Martínez Rangel.
Ahora encontrarte en ese rincón
Ahora encontrarte en ese rincón
ingrato
de poesía desbocada
fragrante
fosforo encendido
omnipotente
balanza marina
sin
importar háblame querida.
Serás
toda tú estando conmigo
o
no serás acaso mi bien querida
feliz
y distante, maltrecha y herida,
innecesidad
de hablarte y traerte
amada,
eterna, me olvida.
Yo
te estaré amando en esta vida
cortaré
los brazos, sanará la herida
y
dejaré la vela allá en lo arriba
para
que tú le veas y te sientas viva.
Te
estaré queriendo toda la vida
sin
mi boca desgarrada o mis brazos rotos,
terminará
la pena y caerás rendida
toda
tú, sin mi: sin vida.
¿Me
pintarás en versos?¿me darás la vida?
si
a mi te has desnudado sin ningún reproche,
sin
darme una noche, sin romper encajes.
Desnuda
toda tú con mis poemas,
con
las cartas vacías, el 22 y mis manias,
habré
de quererte entre los cien días
sin
pintarme un cuadro ¿te estoy reclamando?
Habré
de quererte entre los cien días
con
el inconsciente, en el hipocampo.
Sal
de ahí, amor sal de ahí.
Largo.
Vete, que no te querré así.
Sal
de mi hipocampo amor
de
mis versos, de mi vida,
de
estas ganas de hablarte
desventura
al no encontrarte.
Sin
mi boca desgarrada
sin
mis brazos rotos
así
me veras, como te vi a placer
en
aquella huida, en aquel burdel.
La
vida que soñamos entre camas
en
bonanza, con canciones.
Sal
del inconsciente, del consiente,
sal
de mi vida: tu vida.
Deja
de escribirme,
no
estoy en el roble,
te
estaré queriendo esta tonta vida
termina
la pena y caerás rendida
toda tú, sin mi: sin vida.
-Emmanuel Mará
toda tú, sin mi: sin vida.
-Emmanuel Mará
Amor profano
Emmanuel Martínez Rangel.
Para
ti mi amor profano
sin
comillas y contratos,
con
tu vida a mi medida
y
tus besos desencantos.
Para
ti mi amor profano
con
tus celos y tus llantos,
con
la tilde entre tu nombre
con
mis brazos aferrados.
Para
ti, amor profano
yo
estoy siempre recordando
con
tus brazos, con tus manos
con
tus ojos desbordando.
Para
ti amor: profano,
yo
te seguiré esperando
sin
contratos, sin papeles,
desde
siempre estoy amando.
Para
ti mi amor ingrato
criticado
a eternidad
por
no ser de aquellos sacros
que
se mienten, que se van.
Yo
no soy pa´ poseerte
y
tu no pa´ hablarme así
con
tu vida a mi medida
con
tus besos desencantos.
Para
ti mi amor profano
con
te quiero, con te amo,
pa´
que veas lo que yo siento
pa´
que veas cuanto te amo.
Para
ti este amor que mata,
que
me quema: desbarata
sin
tus lóbregos colores
y
con tantos desamores.
Mi
amor ingrato, para ti
lo
que te siento, lo que pienso
y
no te digo
ya no vivo sin tus besos
entre ratos te maldigo.
Para
ti mi venta de alma
has
con ella una canción
pinta
un cuadro y has rabieta
yo
te quiero corazón.
para
ti amor calumnia
desventura
y la pasión,
yo
te quiero, que te digo,
yo
te amo sin razón.
8*7*9
-Emmanuel
Mará
8 mar 2016
Yo amapola tú diente de león
Katia Sánchez Ortega
Sucede que me sucedes
Cedo a derrumbar mis ojos al costado de los tuyos
Sucede que tus palabras como placer corpóreo
transitan en sensaciones múltiples
indivisas a la orilla de las mías.
Sucede que ni vida ni muerte ocurren
entre tus terrenos
Sucede que sucedes como enigma en mi estado de conciencia,
en arterias y venas, en mi glándula pineal y mis penas
Sucede que hay una guerra en las entrañas,
inexplicable, irrepetible y extremadamente extraña.
Sucede que si pausas o respiras, te llevas con ello
la mitad de mis días.
En mis sépalos te encuentras
terminal y solitario en mi capullo colgante.
Te dispersas como mala hierba
y sucede que no cesas.
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